viernes, 2 de noviembre de 2018

Maldats + Vorttex - Magazine Club

Maldats + Vorttex
Magazine Club - Valencia

Decía Truman Capote: "Soy hombre de obsesiones más que de pasiones", no es mi caso. Mis dos pasiones aparte de mi familia, son la música y la fotografía, el viernes en Magazine se juntaron ambas en un concierto excelente y mayestático; mi rostro dibujaba un perceptible encantamiento enigmático, pues volvía a ver a Maldats, esta vez con tres mujeres a las voces (en la anterior solo era una, Lucia) y a Vorttex, por primera vez.

Para empezar, Maldats, los vi en la presentación del Rocafalles 2017 y ya me gustaron. Su única mujer en la banda, Lucia, me pareció un torbellino impetuoso, ahora son tres mujeres que con intensa pasión empiezan a rapear, "Educació de cable" o "Ciutat de control", y es que Maldats hacen Rap Metal y Dancehall con espíritu combativo, situación social de mundo, feminismo o contra el fascismo; canciones brillantes al tiempo que profundas. Además de Lucia, son Cate y Laura las que llevan las voces cantantes, Carles al bajo, Adri a la guitarra y Pablo a la batería forman la parte instrumental que con Rule a los platos, hacen una comunión de naturaleza ardiente y entusiasta.



"Bombes", "Dilluns negre", "Sempre" “…la clase obrera és ara qui golpeja…” son canciones que me hacen penetrar en los principios de la humanidad para creer en la fraternidad humanística. "La primera pedra", "Electrónica", después de esta, Lucia cantaría una canción a capella de palpitaciones emotivas.

“¡Llibertad d’expresió, sería la bomba!” esta frase forma parte de la canción "Crema" que con la versión particular de "Sols el poble salva al poble" de Berri Txarrak terminaría un concierto que pasaría para mí, de ser temporal a eterno en mis recuerdos, gracias.

Estamos dentro de este mundo, somos comediantes de él, es el proyecto de nuestro delirio y nuestro dolor, por eso un utopista como yo, plasma en sus sueños sus ideales.



Y luego llegaron ellos. Vorttex son una banda de Hardcore formada por cinco miembros, bueno cuatro, porque Mario guitarra y Eduardo bajo, son gemelos, pero esto no hace que sean uno, hacen que sean uno su simbiosis en el escenario. Hacía mucho tiempo que no había visto dos músicos tocar tan bien sus instrumentos (el bajo con los dedos), saltar tanto, tal aptitud encima de las tablas y su complicidad a la hora de ponerse uno enfrente de otro para deleitasen moviéndose al unísono, con esa juventud, ¡19 años!   



Los otros tres componentes no se quedan atrás, Jota a la voz grave de rico tono, va cantando con frenética aptitud y ráfagas entusiastas, canciones como "Uptown", "Je Suis", "Orgullo" o "Tóten". Para Mario, el otro guitarra, "Extinción", "Caja Cristal" y "Virus" son impulsos irreprimibles de ritmos potentes sacados a las cuerdas. Sergio el batería, les da velocidad a los compases, proyectando su doble pedal y tratando de aniquilar el bombo en "Jet" y "Wasap", las dos últimas canciones de esa tarde.



Hastiados de vernos envueltos en el fango terrenal, hoy bañamos nuestro espíritu en olorosas esencias de música, todas, el poeta, la soñadora, el místico, la artista, el romántico, la enamorada platónica, hasta l@s anarquistas.     

Texto y fotografías: Iziar Kuriaki.

No hay comentarios:

Publicar un comentario