viernes, 1 de febrero de 2019

Mantequilla Voladora - Sala Wah Wah

Mantequilla Voladora
Sala Wah Wah - Valencia
01.02.2019

"Este disco cuenta una historia, la historia de cómo podemos salir de la miseria en la que estamos, luchando por nuestros sueños y creencias mediante la revolución de la palabra. Diez canciones compuestas desde el corazón solamente para gritar que somos libres de ser quienes queramos ser y, sobre todo, gritar que no dejaremos de luchar por hacer de este mundo un lugar mejor". 
¡Salud y Libertad!

Esto es lo que reza el argumento publicitario para las redes sociales sobre “#Nuestra lucha no ha terminado” nuevo disco de la banda valenciana Mantequilla Voladora, pocas bandas explican tan bien lo que hay dentro del CD que vas a comprar. Producido, mezclado y masterizado por uno de los mejores productores del país, Raúl Nácher en Soniart Producciones. Lo he escuchado de principio a fin y afirmo que es verdad el razonamiento que hacen sobre su obra.

La introducción sobre del disco físico ya está hecha, ahora vamos a hablar del concierto presentación de “#Nuestra lucha no ha terminado”

La música Punk nació a mediados de los 70 como esplendido movimiento de rebeldía contra el viejo y oprimente canon musical, ha subsistido hasta hoy para que cuatro jóvenes con anhelo colectivo de sobresalir sin excentricidades ni exageraciones se suban a un escenario y luchen por sus sueños y sus creencias mediante la revolución de la palabra y de la música, ell@s son Mantequilla Voladora.



La formación es clásica, Iosune guitarra y voz, Sergio bajo y coros, Sergio B. batería y Edgar guitarra y coros. L@s músicos se caracterizan por la creación y crear simplemente por crear ya es algo bello. Percibimos esa continua atracción de la música que tanto nos ayuda durante toda nuestra vida y flota sobre el lienzo del oído abierto a nuestra pupila. Han elegido como intro la banda sonora de la serie Los 100, que será pie para una de las canciones del álbum.

El tiempo es el que es, es la primera canción que van hacer y primera de su segundo disco. Está inspirada en la serie española El ministerio del tiempo, “Sale el sol buscando épocas en puertas que se abren y están cerca de tu voz”.       



Peces en el mar es el primer single de su primer disco 182 y está claro que la gente conoce la canción porque la cantan tod@s a coro. Contemplando el escenario y lo que hay delante de él me parece percibir que la armonía que exhala de cada alma es igual en todas ellas, formidable.

Como dije antes, la serie Los 100 les ha servido para hacer Sangre Negra, segundo single del nuevo CD “… acostumbrada a pedir perdón, ahora soy hija sin corazón…”

Decía Groucho Marx: “Inteligencia militar son dos términos contradictorios” Bombas, una canción en contra de las guerras, escrita desde un punto de vista con anhelos libertarios, es una crítica a la locura y un canto a la esperanza.



Mantequilla Voladora eran tres músicos, Iosune y los dos “Sergios”, hace poco ha entrado Edgar a la otra guitarra y como dice una buena amiga mía, “Ahora hay más música”. Sergio, el bajista, despierta en mí variopintas emociones, no para, va de un lado a otro del escenario dándolo todo, sus notas al bajo son momentos admirables y desbordantes de emoción.

En lo que llevamos de 2019 y hasta el momento de escribir esta crónica ¡hay trece mujeres muertas por violencia machista! Trece mujeres muertas en 36 días, los hombres que dirigen esta sociedad deben hacer algo. El comienzo es la educación, pero como complemento, penas mucho -pero mucho- más duras, porque si no pasa nada cuando se viola a una mujer, habrá muchas manadas de estiércol con fermentación de hijos de cabrones que sigan violando a mujeres.



Esta entradilla me ha servido, permitidme la licencia y mi enfado, para decir que la canción número cinco que tocan se titula Ni una más, una canción contra la violencia machista “…el miedo de callar pasa a ser mi arma contra ti”. Por eso las cuerdas de la guitarra de Iosune gritaban ronquidos de dolor y a la vez, su voz cantaba que se puede volver a sonreír, que no hay que tener miedo, que hoy sí se puede.

La siguiente es 182, canción que da título a su primer disco y una de mis preferidas, pensaron en hacer un vídeo de este tema, incluso se ve un guiño en el vídeo de Peces en el mar, pero el amor no es Otelo matando a Desdémona y un vídeo siempre se puede hacer. Aquí Sergio B. se sube al sillín, casi se pone de pie tocando a la vez el tom y el base, magnifico.

Inmortales es una canción de amor con un matiz mezzopiano casi llegando a ser un adagio, lógicamente tocada como Pop Punk “Volverás a sonreír en este maldito infierno, aunque solo quedemos tú y yo”.


Sergio el batería, es un músico de supremas armonías que pacta con los sentimientos y el sonido para hacer que surja su auténtica y profunda personalidad Punk.

La serie La leyenda del buscador sirve para que su primer disco contenga Kahlan la siguiente canción, un tema que mira al cielo con ojos verdes y buscando nubes.

“Treinta balas vuelan sin responsabilidad, desfilando elegantes por nuestra ciudad” Treinta Balas.

Mi realidad es una canción de corte social en la que se preguntan cómo pueden escapar de esta puta sociedad y de los políticos que ladran mentiras.

Edgar es el último en entrar en la familia Mantequillera como guitarra, es una feroz euforia completa que magnifica los compases rítmicos, por eso Fuera de emisión la toca para ser escuchada y no oída.

Por fin llegó Eslovenia, primer single de “#Nuestra lucha no ha terminado” los ángeles del bien y del mal concilian abrazados salvajemente el imperio de las almas que allí se dan cita, no hay palabras, ni acentos, ni colores con que expresar esta pasión, todas querían una noche sin término, estaban oliendo el perfume de la quintaesencia de la música como el embrión de una obra en germinación y una vez más hacían todas un coro de emoción y delirio al cantar la canción al unísono.

Iosune es la cantante, guitarra solista y compositora de las letras y de la música. Su voz tiene un timbre caricioso de poderosa seducción, sobre su cara resplandece el loco y alegre sol de la juventud y en el escenario es como la unión de Billie Joe Armstrong y Joan Jett. Soy tan fan de esta músico que le daría besos que traspasasen su cráneo y se metieran dentro siendo juramentos de mi cariño. Dadme 100 mujeres como Iosune y haremos la revolución.


Como diría Medina Azahara, todo tiene su fin y ese fin no podía ser más divertido, bello, alegre y tierno. Verano de 2003 es una historia real de amor entre dos mujeres, una historia de lucha, de ejemplo, de felicidad, de sentimientos. Una canción de belleza y simetría, de elocuencia sonora, una canción donde el valor del corazón triunfa con buenos impulsos e inspira energía contra la intolerancia.

Pero Medina Azahara se equivocó esta vez, y el salvoconducto que abre las puertas de los corazones del público se puso en marcha, esa licencia se llama ¡otra, otra, otra! Volvieron a su primer disco y tocaron Writer y Otra Vez. L@s músicos son simples cristalizaciones del ambiente social en que viven. Seres simbólicos que llevan sobre sus espaldas todas las virtudes de su generación y esta generación de músicos desgarran su alma en una constante y suicida autodisección para luego describir con su instrumento prodigioso, en el corazón y en el cerebro del público, su obra. Un público cuya satisfacción emana de la bondad, de la generosidad y de la ternura que despiden por cada uno de sus poros y ell@s saben que así se llega a la fraternidad humana, gracias público. Salud & Libertad!

Texto y fotografías: Iziar Kuriaki

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